En un giro inesperado de políticas, el Gabinete presidencial comunicó que, para paliar los efectos de la crisis económica, podrían llegar a quitarte lo bailado.
“Gobiernos anteriores le hicieron pensar al hombre común que nadie podía quitarle lo bailado”, remarcó un vocero oficial, “pero ya es momento que los habitantes de este país entren en razón y consideren que la realidad de la economía es otra“.
“Nosotros sentimos de este lugar de crisis podemos salir entre todos, con colaboración, con esperanza, con optimismo, con genuflexia, con introspección, con glifosato y con más genuflexia”, prosiguió el vocero. “Es imperativo que cada uno ponga su granito de arena en este oscuro horizonte que se nos viene. Todos los que viven en este país son en parte responsables por la mala administración que se haga de los recursos nacionales”.
Todavía no se sabe si la medida será efectivizada de inmediato, aunque de así serlo, se asume que aquellas personas que tuvieron un desenlace negativo de una experiencia que en sí fue positiva, habrían de perder la experiencia y los recuerdos de la misma, y solo se quedarían con los resultados adversos. Eso si la medida se aplica de manera literal.